El Faro de Hellín

Con una emocionante alocución llena de recuerdos  

Rafael Sánchez, el actual presidente de la Cofradía de San Rafael, fue el encargado de leer el pregón que todos los años, cuando llegan estas fechas, sirven como apertura oficial a los festejos que se organizan en honor del patrón de la ciudad. 

 Y como en ediciones anteriores este acto se llevó a cabo desde el balcón de la Casa Consistorial, con una Plaza de la Iglesia  ocupada por el Mercado Medieval  y muchísimas personas esperando las palabras de este pregonero, que como se esperaba, no defraudó, ni mucho, a sus oyentes. 

 Y lo hizo en un tono intimista y familiar, con una alocución llena de recuerdos y sobre todo con un personaje principal, su padre Luis, al que tanto debe en la actualidad la Cofradía que ahora el presidente. 

 “Cuando me propusieron ser pregonero no lo dude ni un instante, pues todos sabéis lo que significa San Rafael para mi familia y en especial para mi padre, ese joven costalero que hace más de 50 años se hizo cargo de la ermita  de nuestro patrón que con su sacrificio y esfuerzo ha conseguido crear un importante  patrimonio cultural, religioso y artístico…” 

 Más adelante el pregonero no quiso dejar en el olvido a otros amigos que también colaboraron en esta tarea y  que asimismo figuraban entre sus recuerdos: 

“Entre mis vivencias de aquellos días cuando se acercaban las fiestas de nuestro patrón, lo primero que recuerdo  es cuando salía del colegio y corría en dirección a la parroquia en cuyo sótano ya estaban Rafael “el Sacristán”,  el Loren, Pedro y mi padre, rodeados de cubos llenos de claveles y gladiolos y encima de la mesa un arsenal de cañas y alambres, que había que atarlas una a una para pincharlas en el trono…” 

   Asimismo, hizo  mención a los cohetes que explotaban en el cielo a la salida del trono y la imagen portado a hombros por los voluntarios, este año con mayor esplendor con la remodelación que se había llevado a cabo de la cubierta y la fachada, principio de todos los trabajos y proyectos que quedan por hacer, la novena o la misa del día 24. 

     Ya en el último tramo de su intervención, Rafael Sánchez, reiteró su agradecimiento hacia su padre que les había inculcado la importancia de esta tradición familiar y la colaboración de su hermana Charo y a su mujer, que junto a otros amigos forman esta Cofradía que había sido constituida hacia poco tiempo como Asociación Canóniga. 

  No olvido una semblanza del barrio de San Rafael, nombrado algunas de sus más emblemáticas calles y agradeció a todos los que habían colaborado de distintas formas maneras en la puesta a punto y esplendor de esta nueva edición de las fiestas del patrón de la ciudad, y terminó con el correspondiente grito de exaltación.