Antonio García
Tendremos muchos problemas la sociedad española, pero voto a bríos que estamos en un país de lo más divertido. Francamente, un servidor se lo pasa dabúten con la sarta de sandeces y paridas que a diario nos brindan muchos políticos del solar patrio, dejándonos constancia de la altura mental a la que están bastantes cabezas del rebaño. Y constato además, pues harto lo he comprobado que, teniendo cada cual sus pecados y flojeras, en esto de emitir paridas la izquierda se lleva el gordo. De verdad, no es afán de criticar, ni es partidismo ni nada que se le parezca, es que salta a la vista a poco que se sigan los hablares públicos de nuestros ilustres chupaerarios, que bien vienen a demostrar las poquitas luces, preparación y méritos que se necesitan en este país para llegar lejos y hacer fortuna. Vamos, que no hay ni que madrugar. Además es que tienen un olfato para detectar las necesidades vitales del pueblo, que para sí lo quisiera un pachón rastreador.
El pufo que aquí les presento sale de la factoría Podemos –qué raro, ¿verdad?-, por boca de la portavoz (o portavoza) de su ejecutiva, doña Noelia Vera, licenciada en periodismo y política morada, que además va a hacer cierto aquel dicho: <<cuanto más estudís, más tontismos sís>>.
El tema de fondo es la “Ley Orgánica 3/2007, de 22 de marzo, para la igualdad efectiva de mujeres y hombres”, que, como no podía ser de otra manera, es made in Zapatero. Y naturalmente, mantenida por don Rajoy, como toda la basura legislativa que heredó del gobierno anterior.
Ya saben, se trata de que en todas partes tiene que haber el mismo número de mujeres que de hombres. Por cojones, ¡perdón!, por ley.
Pues resulta que la tal Noelia Vera a apuntado con su ojito izquierdo a la Real Academia Española de la Lengua -para los amigos, RAE-, como ejemplo y chivo expiatorio para la propuesta que Podemos incluirá en su programa electoral, con vistas a la próximas elecciones generales. Es decir, <<hacer obligatoria la paridad en los órganos de dirección de las instituciones y entes públicos, o que dependan de financiación pública, en un máximo de cuatro años, que conlleva la retirada de subvenciones en caso de incumplimiento>>. Lo primero que me ha llamado la atención es que la paridad la quieren obligatoria “en los puestos de dirección”. ¿Y por qué no en los equipos de limpieza? Pero vamos, es una de mis preguntas tontas. O sea, el mismo número de jambos que de jambas en el sanedrín de la RAE. De Académicos que de Académicas. Y otra pregunta simplona: ¿cómo piensa hacer esto Podemos, si gana las elecciones? (que con esta propuesta las gana seguro y por mayoría). En la actualidad hay 46 sillones ocupados, ocho de ellos por hembras. El resto son varones (¡Malditos machistas!). ¿Es que pondrán impedimento los señores ilustrados a que entren mujeres de valía? ¿Pensarán echar a tantos académicos come sean necesarios, para que sus puestos los ocupen académicas? ¿Tiene ya el partido preparado el equipo femenino? Terror me da si lo eligen entre sus filas.
Lo mejor de todo es que ya han señalado al primer cabeza de turco que se tendrá que ir a la puñetera rúe: Arturo Pérez-Reverte, muy culpable él de ser porsaquero y políticamente incorrecto. La Noelia le ha hecho un llamamiento para que despegue su culo del sillón que ocupa y lo deje para un culito de señora. Bueno, a él y a sus compañeros. Y si se van todos mejor. O sea, que no importarán un pijo los méritos, sino que haya “paridad”, como mínimo.
La cosa es que esa Ley Orgánica estaba casi en el olvido, o eso parecía, hasta que Podemos, captando el clamor del pueblo, la manifiesta y urgente necesidad comentada por los españoles en todos los espacios públicos y privados del país, pretende salvar a España de este insufrible retraso y la flagrante injusticia que supone la falta de paridad en las instituciones, la política, las empresas de obras públicas, la albañilería, los talleres mecánicos, los servicios de barrenderos, la minería y los pub y discotecas. Por de pronto se libran los conventos, pero todo se andará.
Las universidades tendrán que equilibrar los sexos (ahora llamado género). El ejército, Policía Nacional y Guardia Civil ya se guardarán de tener más agentes que agentas. Se hará un censo de camioneros y camioneras para ver dónde está el desequilibrio, y a qué se debe. Y en aquellos lugares donde aún se puedan celebrar corridas de toros, en los carteles deberán figurar igual número de matadoras que de matadores. Sobre si han de torear solo toros o vacas también, no se dice nada. Pero no quiero dar ideas.
Sin embargo, estás ideólogas de pacotilla, subproductos de las políticas más descabelladas y dañinas, no dicen nada de ocupar por hombres la mitad de las profesiones ocupados mayoritariamente por mujeres.
Pues bien, amigos, todo esto que parece broma, no lo es. Es producto de la Ideología de Género. Esa idea de que debemos ser todos, todas y todes tan iguales, tan iguales, que no podrá haber ni una puta diferencia numérica en los puestos ocupados en ningún sitio. Aquí no cabrán méritos, preparación, tendencias naturales en la elección de profesiones y oficios, vocaciones, actitudes y aptitudes innatas, etc. Porque como dice doña Noelia, España es un país “feminista”, que lo sabe de buena tinta -siempre se había dicho que es machista, pero por lo visto ha cambiado de repente con vistas al 28 de Abril-. Y si no lo es, lo haremos a fuerza de Decreto Ley. Pero fuera como fuese, entre unos y otros, desde izquierdas a derechas, tienen que conseguir que se nos meta hasta en el ADN el feminismo radical y “de género” con sus nefastas consecuencias para el individuo, la familia y la sociedad entera, obedeciendo agendas e intereses internacionales para el aborregamiento de la población.
El que avisa no es traidor.
¿Usted se lee después de escribir? No se merece ni una crítica constructiva