El Faro de Hellín

De los seis que se van a llevar a cabo durante este año en el municipio de Hellín

Tal como anunciaron hace un par de semanas el concejal de patrimonio, Juan Antonio Andújar, y el director del MUSS, Pablo Cánovas, el pasado lunes se inició el proyecto de excavación de la aldea alto-medieval de Loma Eugenia, uno de los seis proyecto de investigación arqueológica que se van a llevar a cabo durante el presente año, dirigidos por distintos investigadores y equipos de trabajo arqueológicos de varias universidades, entre ellas la de Alicante, que participara en este programado en primer lugar.

El concejal, antes de entrar en detalles señaló los que se están “en la sala de espera” como el del Tolmo de Minateda, el Fortaleza de Isso, el Cañón de los Almadenes y el Pico de la Tienda, proyectos que están en desarrollo, se les ha unido el que se acaba de iniciar en Loma Eugenia y el del Castillo de Hellín, que se trabajará más adelante, que convierte al municipio de Hellín en la comarca de España donde más proyectos arqueológicos se van a realizar en un mismo año.

También indicó en esta ocasión que todos los proyectos contarán con la subvención de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha y la del Ayuntamiento de Hellín, que podrá llegar a los 85.000 euros, como también habrá que considerar las ayudas del Instituto de Estudios Albacetense de la Diputación Provincial.

Un yacimiento visigodo de finales del siglo VI
Ahora, por fin ha llegado el momento de llevar a cabo el convenio entre el Ayuntamiento de Hellín y la Universidad de Alicante con un presupuesto de 3.000 euros, que se firmó en el año 2019, que quedó estancando por la llagada de la pandemia, y asimismo se ha logrado un acuerdo con el propietario de los terrenos, rebajando el impuesto del IBI, mientras duren las excavaciones. Al frente de las investigaciones estará Victoria Amorós, del equipo de la Universidad de Alicante y Pablo Cánovas, junto a un grupo de estudiantes de distintas universidades. El asentamiento, con una extensión de dos hectáreas, aunque al principio solo se trabajará en unos 100 metros cuadrados, está situado entre las pedanías de Agra y Cañada de Agra y, según relata Cánovas, fue descubierto en el año 1993, cuando se realizó un desmonte para hacer unas obras y se descubrieron varias tumbas.

Este proyecto, que se recoge la investigación de este poblado de la época visigoda y su necrópolis de finales del siglo VI o principio del VII, estará dividido en varios etapas, que se han iniciado con la limpieza del área donde se va a trabajar con la retirando la vegetación y a continuación la excavación arqueológica, recogida de datos, incluidos la fotogrametría y los topográficos para completar la investigación para llegar a una catalogación e inventario de os materiales arqueológicos encontrados, que serán reunidos en el MUSS, para tras su ordenamiento, redactar un informe con la memoria científica que serán ser publicados para su divulgación.