El Faro de Hellín

De Federico Coullaut Valera

Por Francisco Javier Morcillo

Foto Emilio Cerdá

Hoy es un Viernes Santo diferente a los demás, ya no por la lluvia, como otros años que nos impedía salir a la calle, la situación que vivimos es otra mucho más delicada y toda la Semana Santa se ha visto afectada por este Covid-19 que nos ha hecho cambiar nuestras vidas y que espero que todo acabe bien.
No por ello, quería dejar pasar por alto este Viernes Santo del 2.020, tan especial para la imagen con la que desfilamos.

Este Viernes Santo se cumplen 75 años de la primera salida en procesión de la imagen tallada por el Escultor Federico Coullaut Valera, Nuestro Padre Jesús Nazareno de Hellín, y por ello es una fecha importante, a pesar de no estar en el Calvario, realizando el encuentro con la Hermandad de la Santa Mujer Verónica.

Es estos 75 años serían muchas las anécdotas que se podrían contar, yo no las he vivido todas por mi edad, pero si una gran parte de ellas.

Son muchos años los que acompaño a la imagen y muchos de ellos sobre mis hombros, he vivido momento buenos y momentos menos buenos en este tiempo, pero siempre desde un lado muy humilde, sin querer llamar mucho la atención y como se suele decir, la procesión va por dentro, en mi caso nuestra preciosa imagen.

Son muchas las personas que podría recordar, como anécdotas vividas, como he comentado anteriormente, pero no quiero dejarme a nadie seria injusto, todos y todas hemos colaborado de una manera u otra en nuestra Hermandad.

Pero ayer cuando comencé a escribir este artículo, escrito o estos sentimientos, como queráis catalogarlo, pensé y por ello quiero que podáis comprender, pense centrar estas palabras en una persona, alguien que gracias a ella contamos con la imagen desde 1.945 y que desde entonces la hemos disfrutado todos los componentes que hemos pasado por la Hermandad, generación tras generación, y que todavía se encuentra entre nosotros, gracias a ella y su marido, podemos seguir disfrutando de esta imagen todos los componentes de la Hermandad, como todo el pueblo de Hellín, me estoy refiriendo a Doña Encarnación Lorenzo, que a sus 106 años , está con nosotros y sobre todo a su marido D. Jacobo Serra Martínez, que por desgracia nos dejó hace años, todavía lo recuerdo siendo yo un niño.

Doña Encarnación en estos momentos y sobre todo en este día, es el símbolo de nuestra Hermandad, ya que por suerte seguimos contando con ella y ojalá sea para muchos años.

No quiero dejar de lado a D. Jacobo Serra , que junto a Dña Encarnación Lorenzo, se encargaron en 1.944 de dar luz una gran proyecto,una obra de arte para la admiración de todo el pueblo de Hellín, encargando para tal fin, al Escultor D. Federico Coullaut Valera, obra que tanta devoción levanta entre los Hellineros, Nuestro Padre Jesús Nazareno.

Aquel Martes Santo de 1.945 la imagen llegó a Hellín, en tren junto al Escultor, seguro que fue un día especial para D.Jacobo y Doña Encarnación , de la gran talla realizada y que hasta la fecha seguimos disfrutando
Doña Encarnación, con sus 106 años en la actualidad, creo que se merece este distintivo, ser esa cruz de guia de esta Hermandad y un día como hoy a todos, y sobre todo a ellos nos hubiese gustado celebrarlo de otra manera, sobre todo con la imagen en procesión.

Hace unos años escribí un artículo sobre Doña Encarnación y hoy continuo pensando lo mismo que entonces o incluso con más intensidad, sobre todo por su fortaleza.

Los que la conocemos y puedo asegurar que no ha cambiado, lo pueden afirmar su hija, sus nietos y nietas, es una persona con muchos temperamento, con la edad es normal algo menos, pero muy exigente consigo mismo y con los que les rodean, eso si con un gran corazón.
Desde pequeño la recuerdo como pasaba revista a todos los que desfilabamos, que todo estuviese perfecto antes de salir de su casa, cordones bien colocados, túnicas a la medida, coronas ajustadas, perfectos para lo que se íbamos a vivir, desfilar por las calles de Hellin, junto a nuestra imagen, además la importante labor como Camarera de la imagen, desempeñando su misión a la perfección, y que ha trasladado a su hija y nietas.

Es mi pequeño homenaje a nuestra imagen, que esta con nosotros 75 años, agradeciendo cómo no a su hija y, sus nietos y nietas, el que continuase con el gran trabajo que realizaron sus padres y abuelos.

Seguramente cuando todo lo que estamos viviendo pase, tendremos oportunidad de realizar más actos, con motivo del 75 Aniversario y tendremos momentos para recordar todas esas anécdotas y detalles que comentaba al principio, bandas que nos han acompañado en este tiempo, personas que han significado mucho para la Hermandad por su trabajo y dedicación, personas que por desgracia nos han dejado y ya no están entre nosotros, restauraciones del trono e imagen, un sinfín de cosas que viviremos todos y todas juntos. Pero hoy ese primer homenaje va dirigido a Doña Encarnación Lorenzo por todo lo que nos ha dado y como siempre apuntó a su marido D. Jacobo Serra, por ello dedico estas palabras en el 75 Aniversario, un abrazo.