El Faro de Hellín

En un partido donde no faltaron los altercados y las expulsiones

Fútbol Juvenil: Hellín, 0; Manchego, de Ciudad Real, 2

Alineación Hellín: Víllora; Carlos, Javier Talle, Pablo Cañabate, Jocho; José Javier, Eloy, Víctor, Guiri; Erik y Alfredo. Luego jugaron, Morcillo, Pedrito, Juan Carlos, Josémi y Manu.

Por segundo año consecutivo, el Hellín revivió la tragedia deportiva de ver como el rival de turno (la pasada temporada fue el Sp. Alcázar) le levantaba una eliminatoria, tras perder el partido de ida. En Santa Ana, tras el 0 – 1 en Ciudad Real, el Manchego amargó la fiesta hellinera por el ascenso a la Liga Nacional y se impuso, por un justo 0 – 2 en el marcador

Fue un partido típico de Play Off, es decir, de muchos nervios y gran cantidad de errores no forzados. Sobre todo en el Hellín a merced, desde el principio, del cuadro de Ciudad Real, que más tenía que arriesgar. Y suyas fueron las primeras ocasiones, como en el minuto once, en un gol anulado por un fuera de juego, más que dudoso, del atacante, en el momento del remate a las redes.

Con el Hellín muy atrincherado y soltando la pelota arriba, en ocasiones, sin contemplaciones y sin la presencia de jugadores, en ataque, para evitar pérdida innecesarias y peligrosas en la zona de ataque del Manchego, éste dio otro aviso en el minuto 16, pero el portero titular hellinero en esta ocasión, Víllora, uno de los destacados (a pesar de los goles), junto al lateral derecho, Jocho, evitaron que la eliminatoria estuviese igualada.

La recta final del primer tiempo fue más emocionante y tensa, si cabe, ya que se anuló un gol, por una falta de un jugador del Hellín en el duelo aéreo del balón con el portero, que salió algo blando e indeciso. Pero el asistente levantó el banderín, cuando ya gran parte de la grada, y del banquillo hellinero, lo festejaba por todo lo alto, como el 1 – 0.

En el segundo tiempo llegaron los goles y los altercados
Comenzó un segundo tiempo que resultó ser una losa para el Hellín. Y es que, en un momento dado se produjo una pelea, entre dos jóvenes aficionados hellineros, en las gradas, que derivó en la presencia de la Policía Nacional, y uno de los dos implicados, atendido en el mismo lugar, trasladado en ambulancia hasta el Hospital, con un fuerte golpe en la cabeza. Los jugadores se distrajeron al ver el movimiento importante que, en ese momento, se estaba produciendo en esa zona del campo.

Fuera por esta circunstancia o no, lo cierto es que, en el minuto nueve, el Manchego igualaba la eliminatoria, con el 0 – 1 en el marcador, obra de su delantero, Rodrigo, que no hizo sino aumentar la ansiedad y los nervios de un Hellín, bloqueado, y al que Santa Ana se le empezó a parecer a una pista de aterrizaje, sin fin, tanto a la hora de atacar, en busca del empate, como replegarse para defenderse ante las contras de los ciudarrealeños.

El Manchego-un buen equipo y, sobre todo, en físico, y con la calidad de algunos de sus jugadores, como Patiño. Así, al minuto 22, en una jugada en la que los visitantes pudieron rematar, hasta en tres ocasiones, en las inmediaciones del área, en la última, no falló y, desde el balcón el área, Álvaro lanzó un chut, entre una nube de jugadores de ambos equipos, que sorprendió al portero.

A partir de ahí, a pesar de que restaba mucho tiempo para el final, fue un querer y no poder, con un Hellín, que necesitaba dos goles para ascender, que se lanzó a la desesperada.

Dos expulsados y un penalty fallado
Luego, Jocho, uno de los grandes destacados del partido, y de la temporada, era expulsado, por doble amarilla, por lo que la empresa se ponía más complicada si cabe. Y se tornó imposible cuando, Morcillo, uno de los recién salidos al campo, en un rifi rafe con un rival al que, después de una dura falta, le empujaba, veía la roja y su equipo se quedaba con nueve.

Sin embargo, el Hellín lo hizo francamente bien, en medio de una situación muy delicada. Casi desesperada, y ya sin estrategias de ningún tipo. Y hasta en el minuto 92, tuvo la ocasión de poner emoción al descuento de más de cinco minutos que se concedió, en el penalty que lanzó Víctor y detuvo, en una gran parada, el portero del Manchego, poniendo el punto y final a la eliminatoria.