El Faro de Hellín

Las lluvias mejoran parcialmente los embalses de Hellín, pero El Talave empeora

Este es el estado de los embalses de la Cuenca del Segura ubicados en nuestro término municipal

Foto Talave / M.A.

Camarillas supera su media histórica, El Cenajo muestra una ligera recuperación y El Talave experimenta un descenso inesperado pese a las precipitaciones. La evolución reciente de los embalses ubicados en el término municipal de Hellín, pertenecientes a la cuenca del Segura, evidencia una mejora desigual que no permite hablar aún de una recuperación sólida del sistema hídrico regional.

Embalse de Camarillas: mejora notable

El embalse de Camarillas es el único que se sitúa por encima de su media histórica y refleja una respuesta significativa a las lluvias de los últimos días. Su evolución es, por el momento, el dato más alentador en el contexto local.

Embalse de El Cenajo: avance limitado

Aunque experimenta un leve incremento, El Cenajo, el embalse de mayor capacidad en la zona, se mantiene en niveles considerablemente bajos, lejos de sus promedios históricos. Su lenta recuperación refleja la persistencia de un déficit estructural de agua en la cuenca.

Embalse de El Talave: situación crítica

A pesar de las precipitaciones recientes, El Talave ha sufrido una reducción en sus reservas. Se trata del único de los tres embalses que ha registrado un descenso, lo que pone de manifiesto una situación particularmente preocupante. Esta disminución puede tener consecuencias tanto para el abastecimiento agrícola como para el equilibrio ecológico de la zona.

Perspectiva general

Los datos confirman una mejora relativa tras las lluvias, pero también subrayan la persistente vulnerabilidad hídrica del sistema de embalses del término de Hellín. La situación de El Talave, con una pérdida de recursos en un contexto de precipitaciones, exige una revisión urgente de la gestión y distribución del agua en la cuenca del Segura.

Fuentes técnicas consultadas en el entorno de la Confederación Hidrográfica del Segura (CHS) insisten en la necesidad de adoptar medidas estructurales ante una sequía que, más allá de episodios puntuales de lluvia, sigue afectando de manera profunda al sureste peninsular.