El Faro de Hellín

José Emilio Pinar acusa a Manuel Mínguez de ser “un sepulcro blanqueado”

Por sus declaraciones con relación a la directora de la Residencia de Las Hazas

Tras las declaraciones efectuadas por el presidente del Partido Popular, Manuel Mínguez, donde se hacía relación a la directora de la Residencia de las Hazas, preguntando al concejal socialista, Emilio José Pinar, su marido, como se había llevado a cabo el proceso de nombramiento, este salía al paso en una rueda de prensa “para dar respuesta a las palabras del portavoz del grupo popular vertidas ayer en su comparecencia pública, en las cuales me acusa de estar sometiéndolo a una campaña de desprestigio, basada, según él en calumnias y mentiras”.

Más adelante, tras señalar que le entristecía, pero no le sorprendía, que el portavoz del grupo popular utilizase la difamación, la calumnia, la mentira y el esparcir basura para argumentar y justificar las decisiones que tomó siendo alcalde de Hellín, Pinar dijo confesar que tenía, hasta el día anterior, un buen concepto de Mínguez ya que juntos habían participado en muchas celebraciones religiosas, pero que tras sus palabras “ he de decir que hoy más que nunca tienen sentido las palabras que Jesús de Nazaret lanzó a los fariseos y comerciantes del templo, tanto ellos como hoy el señor Minguez, son sepulcros blanqueados, una fachada de golpes de pecho y una voz que al cantarle a Dios sobresale por encima de las demás, pero que cuando rascas un poco te das cuenta de que es una persona a la que no le importa jugar con el pan de las personas ni hacer daño de manera gratuita”.

Tras recordar que eran más de 6 años los que Manuel Miguez llevaba como político, parecía que para él todo valía: “atacar, mentir, manipular y sembrar duda sobre personas y acontecimientos que nada tienen que ver con la labor de este concejal que les habla”.´

Más adelante, después de pedirle a Mínguez que hiciese su labor de oposición con respeto y así lo tendría como aliado y compañero de viaje, y que él cuando hablaba de la labor que realizaba o de sus decisiones, “jamás había mentido, difamado, calumniado o sembrado duda sobre nada que no tenga que ver con su faceta política. Su vida y la de su gente me es indiferente”.

Por último el concejal socialista cerraba su intervención con estas palabras: “quiero decir que si hay algo de lo que estoy orgulloso en mi vida, es de mi familia, porque todos y cada uno de ellos pueden salir a la calle con la cabeza bien alta y las manos limpias, somos una familia humilde y trabajadora y yo me siento orgulloso de todos y cada uno de ellos, desde la que está en paro a los que trabajan. Espero y deseo que el señor Minguez sienta lo mismo que yo”.