Sin víctimas personales
Las sirenas de los coches del SEPEI y la Policía Local rompieron la calma de la tarde este domingo, cuando, aproximadamente a las 18,15 horas acudían al número 5 de la calle San Juan de Dios, perpendicular a la Gran Vía, a la llamada de unos vecinos del tercer piso.
Al parecer, el extractor de humos de la cocina de dicha vivienda se había incendiado provocando sobre todo una gran humareda que llegaba a los pisos vecinos.
La rápida intervención del personal del cuerpo de bomberos, auxiliados por los miembros de la Policía local, evitó que el fuego se propagase y que poco a poco todos los habitantes del inmueble pudieran regresar a sus hogares, sin que se se produjesen daños personales.