El Faro de Hellín

El PP inicia una campaña de apoyo a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado

Recogiendo firmas en el mercadillo semanal

En la mañana del miércoles, con el fin de aprovechar el flujo de personas que acuden al mercadillo semanal instalado junto a la Gran Vía y en el espacio ocupado por el Recinto Ferial, la Rosaleda y calles adyacentes, el Partido Popular de Hellín inició una campaña de recogidas de firmas en apoyo a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, donde contaron con la colaboración de la diputada nacional, Carmen Navarro y el provincial, Francisco Vizcaíno.

Fue Navarro la que atendió a los medios de comunicación junto a la mesa donde estaban colocados los pliegos de recogida, indicando la necesidad de realizar actos de esta índole, dada la gravedad de los sucesos ocurridos días pasados en numerosas ciudades de la geografía del país, la gran preocupación que existía entre los ciudadanos, criticando al gobierno del PSOE, por hacer coalición con la izquierda más radical de este país, que está alentando la violencia en las calles”.

“Son actitudes que no podemos tolerar ni un minuto más-continuó la política- tenemos que respetar nuestro estado democrático y nuestro estado de derecho. La ley se basa precisamente en evitar que estos violentos puedan avasallar y sembrar el odio y la violencia en nuestras calles y las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado tienen la responsabilidad, la obligación y la misión la loable de defender a todos los ciudadanos”.

Guardar la ley y el orden
Más adelante, tras reflejar la situación sanitaria que vive el país a causa de la pandemia provocada por el coronavirus, recordó que en estos días se cumplían 25 años de la llegada del Partido Popular al gobierno, con lo que la alternancia política consolidó la democracia en España, por ello se tenían que reivindicar los valores importantes, uno de ellos guardar la ley y el orden a través de las distintas fuerzas de seguridad.

Asimismo, la diputada habló de los recientes datos del empleo, que calificó como “demoledores”, con casi cinco millones y medio de personas “que les gustaría trabajar y no pueden. Cuatro millones y medios de parados y 900.000 en un ERTE, y más de un millón y medio de personas que han tenido que bajar las persianas de sus negocios”.