El Faro de Hellín

Se encontraban en la perrera municipal y están siendo adoptados

Tras la noticia surgida en nuestra ciudad que un pequeño grupo de perros iban a ser sacrificados el día 20 de julio en la perrera municipal por falta de recursos, surgía un movimiento de solidaridad a través, de la prensa y sobre todos las redes sociales para evitar este sacrificio.

Ahora, a través del suplemento del periódico EL PAÍS, “Verne” nos ha llegado una información, que en Twitter ha alcanzado los 9.000 retuits y ha logrado movilizar a cientos de personas, para intentar salvar a los animales de esta perrera.

Así, aseguran que la asociación local de defensa de los animales, San Francisco de Asís, organiza varias veces al año campañas de sensibilización similares en redes sociales, pero esta vez ha sido especialmente intensa, según cuenta a “Verne” por teléfono, Lina Ortuño, presidenta a la asociación:

“No sé el motivo, supongo que cada vez la gente se moviliza más y está más sensibilizada con este tema”. Alguna de las fotos del álbum de Facebook correspondiente a este mensaje se ha compartido 1.500 veces y acumula decenas de comentarios. “En realidad, gracias al trabajo de las voluntarias de la asociación, llevamos desde el año 2008 sin sacrificar ningún perro de la perrera”, aseguraba a la periodista Raquel Piñero.

Por su parte un portavoz del Ayuntamiento de Hellín respondía: “Lo que ocurre es que en agosto vamos a acondicionar las instalaciones de la perrera: arreglar comederos, fumigar… y el espacio tiene que quedar vacío. Si para entonces todavía hay ejemplares que no han sido adoptados, se enviarán a casas de acogida o a otra residencias”.

Ante la controversia de la alarma creada al poner fecha límite para acabar con la vida de los perros, Lina Ortuño respondía a la periodista , que la fecha del 20 de julio se había puesto desde el Ayuntamiento como límite para vaciar la perrera municipal, pero que ellos siempre evitarían, a toda costa, que ningún animal fuese sacrificado, como lo están haciendo desde hace más de ocho años.

“Por supuesto que vamos a impedir que los perros se sacrifiquen, aunque llegue el día 20 de julio, pero el gasto de la casa de acogida o de la residencia no lo va a asumir la perrera, ni el Ayuntamiento; lo asumiremos nosotros”, comentaban la presidenta de la Asociación San Francisco de Asís, que está al frente de esta entidad desde 2006.

En este reportaje, Lina Ortuño, también cuenta que esta Asociación la gestiona un equipo de unas diez personas que van fluctuando y dedican parte de su tiempo y dinero a encontrarles hogar a los perros abandonados que viven en la perrera de Hellín. En ocasiones también se ocupan de gatos callejeros. Calcula que han recolocado a unos 2.000 perros en la última década.
No reciben ningún tipo de subvención.

Sobre la subsistencia de la asociación explicaba, que actualmente la colaboración con la actual Corporación Municipal es buena, eso si, no reciben ningún tipo de subvención, ni partida presupuestaria, manteniéndose gracias a los socios que pagan una cuota de cinco euros al mes y a donaciones de particulares.

También puntualizaba que “el Ayuntamiento en la perrera cubre el sueldo del lacero y el pienso para los animales que en ella viven enjaulados, pero la responsabilidad de gestionarles un hogar la han asumido los voluntarios de la asociación”.

. “Al principio, continuaba, el Ayuntamiento se hacía cargo de las vacunas y del chip para facilitar la adopción, pero el gasto era tanto que ahora ya no lo hacen, corre de la cuenta del adoptante. Y si hay gastos veterinarios, por ejemplo de un animal que tenga que estar ingresado, los cubrimos nosotros”.

Más adelante, tras señalar la importancia de las redes sociales cuando ocurre un asunto como el actual, por su gran difusión, Lina Ortuño daba en es este reportaje más detalles sobre esta campaña lanzada el pasado 1 de julio en la que se publicaba la historia y circunstancias de cada perro en un álbum por Facebook, con ello había logrado 18 adoptantes, pero que aún quedaban dos para ser acogidos.

“Lo más importante es el feeling que nos dan al hablar por teléfono. También les pedimos que tras la adopción nos mantengan informados del estado del perro y que nos envíen fotos. Alguna vez, muy pocas, ha habido casos en los que se han devuelto a la perrera, pero lo más normal es que sean historias con buen final”, comenta.

La esterilización como solución
Lina Ortuño también hablaba a Raquel Piñero sobre el problema que existe con los perros abandonados, que no son esterilizados y luego no quieren hacerse cargo de los cachorros, por ello había que fomentar este uso y obligar a que todos los animales estén identificados con sus respectivos microchip.

Aunque en estos momentos los siete perros ya tienen un sitio donde quedarse durante el cierre temporal de la perrera de Hellín, Lina calculaba que, para noviembre, el lugar volvería a estar lleno y por ello lanzar una nueva campaña para conseguir adoptantes.